"Construyendo el ALBA desde los Pueblos"

“Operación Milagro en la comunidad, cuando Patria es humanidad”

Publicado el 17 de agosto de 2017

Operación Milagro se implementa en Argentina desde el  año 2005. Desde entonces, pasó por varias etapas, pero lo que nunca  se ha modificado  es su capacidad de dejar su huella entre la población que más necesita acceder a la atención oftalmológica, una dimensión de tantas de las que grandes sectores de nuestro país queda excluido.

La estrategia que lo hace un programa de salud diferencial es la denominada “pesquisa activa”, la cual tiene como objetivo: por un lado trascender los muros de la institucionalidad, movilizando a todo el equipo médico, pero también, no médico, a las comunidades no sólo urbanas sino también rurales de nuestro país.  Por el otro lado, con esta estrategia de participación  comunitaria en el campo de la  salud visual, se logra derribar dos barreras claves en el acceso. Por un lado, el/la médica en la comunidad y por el otro, la posibilidad de divulgación de la causa y consecuencia de ceguera que tienen muchas personas (sobre todo del rango etario adulto mayor).

Pero no sólo se derriban barreras sino también principios, que el sistema capitalista construyó y que en el día a día reproduce (cristalizando un orden social y político atomizado, egoísta y depredador) al punto que “parece natural pagar por salud”. La gratuidad en el campo de la salud no debería ser un fin en sí mismo, para quienes trabajamos todos los días en este ámbito. La noción de derecho y de que otra salud es posible, se construye trascendiendo los muros de los consultorios para pasar a los lugares  donde más se necesite de nuestra labor.

Este acto constitutivo del programa no se puede pensar sin un colectivo de personas y organizaciones que lo sostengan, sin un entramado que consolidan las redes para que se logre construir otro tipo de salud, el cual incorpora otro tipo de médicos/as y cómo se concibe al paciente  ¿Qué media entre ambos? El dinero, no. La mercantilización de una relación, no. Media solidaridad, amor y respeto por la vida. Se establece un vínculo donde el otro/a  a  atender es una persona con condiciones de vida, con una trayectoria e inserción en nuestras sociedades, y también en las instituciones de salud.

Desde que arrancó el año, el programa lleva  siete pesquisas en diferentes barrios y comunidades donde se articuló con organizaciones políticas de base,  e instituciones, como ser cooperativas  y  escuelas secundarias, que han movilizado a sus estudiantes a trabajar en este caso específico de salud visual.

La experiencia nos sigue demostrando que el camino es más largo, sinuoso y con varios precipicios que sortear. Pero también, no solo  hay rocas. Cuando una práxis se enuncia desde la pedagogía de la esperanza, con las certezas de que nos brinda el principio solidario, con el ejemplo del pueblo cubano en nuestro horizonte,  nos encontramos con resultados que no se pueden medir en números.

Como escribió Cortázar: “Probablemente de todos nuestros sentimientos el único que no es verdaderamente nuestro es la esperanza. La esperanza le pertenece a la vida, es la vida misma defendiéndose.” Por la vida que no se vende ni se compra, continuaremos fortaleciendo esto que creemos una salud visual para todos y todas.

Pesquisas:

23/04-Asentamiento “Los Artesanos”, ciudad de Cba.

17/05- Los Chañaritos,  Cruz del Eje.

17/06- Barrio Brigadier San Martín, ciudad de Cba.

01/07- Localidad de Sarmiento.

08/07- Barrio Bajo Yapeyú.

22/07- Barranca Yaco.

05/08- Barrio Alberdi.